sábado, 20 de septiembre de 2014

Uniendo en Bicicleta las Capitales de Salta con Tucuman ("Valles Calchaquies 2002")


Uniendo en bici Salta (Capital) con Tucumán ( Cap.), por los Valles Calchaquíes:

 

¡ Quién dijo que el norte Argentino no se puede hacer en Febrero en pleno verano...! ; Si que se puede....! , siempre y cuando se respeten los horarios de alta exposición solar.
Si bien este viaje lo tenía proyectado hacerlo a fines del año pasado, los graves problemas acaecidos en el país por todos conocidos postergo lo mío como la de tantos argentinos.
Ahora al haber salido una promoción de ticket aéreo (posiblemente debido a la gran malaria), además hacer un impase en mi trabajo, decidí de “rompe y raje”, armar y organizar en poco tiempo este nuevo raid el de unir Salta con Tucumán, con una particularidad, hacerlo con mis dos hijos Carlos de 14 años y Julián de 12 años.
Así que mapa en mano, calcule los kilómetros entre ambas puntas (unos 400 kmts.), nos impusimos realizar al menos un promedio de 80 kilómetros por día, lo que dio un resultado de hacerlo en 5 días.
Luego, teniendo entonces la cantidad de días, saque ida aérea para un Domingo a Salta, se suponía que pedalearía los cinco días restantes Lunes, Martes, Miércoles, Jueves y Viernes, y la vuelta entonces pero desde Tucumán el Sábado.
Así fue nomás...
Luego vendría pensar que cosas llevaríamos y como repartiríamos las cargas entre los tres, opte por llevar 4 alforjas, las dos más pesadas las llevaría yo: una con mi ropa, y otra con las camperas rompevientos de los tres que son pesadas.
 También llevaría yo el mapero delantero , en el : el mapita con el circuito a realizar , mi riñonera con el dinero y documentos de todos , las cámaras de repuesto ( 3 para las bicis de los chicos rodado 26 y 2 para la mía rodado 28 ) , la maquina de fotos , etc. y además una alforjita tipo bolso de mano superior trasera en donde llevaría varias cosas tales como : faroles delanteros , destelladores traseros , inflador , protector solar , gorritas , un pequeño botiquín , dos bolsitas de chicles , papel higiénico , etc , etc.
Por su parte Carlitos (el mayor), llevaría dos alforjas algo más chicas: una con su ropa y la otra con la ropa del hermano.
Y por ultimo Julián, se limitaría a llevar a las bolsas de embalar las bicis en el avión plegadas que también tienen lo suyo en peso, e indefectiblemente hay que transportarlas para el regreso.
Luego solo vino embalar nuestras tres bicicletas, así que a cada una de ellas solo sacamos la rueda delantera de las dos Zenith “andes” de los chicos, la adosamos con precintos plásticos a sus respectivos cuadros y cada una a su bolsa.
Por mi parte lo mismo hice con mi híbrida Diamondback “approach”. Ya estábamos listos ahora para partir.
  • Domingo 10 de Febrero de 2002: Vuelo de ida a Salta Capital.
    Salimos en un vuelo de Dinar a las 13:30 hs desde aeroparque y luego de una escala en Tucumán, llegamos a Salta a las 16:25 hs.
    En el mismo aeropuerto armamos  nuestras bicicletas y nos vamos pedaleando hacia la capital Salteña que esta a unos pocos kilómetros, si mal no recuerdo unos 8 o 9.
    Lo primero que hacemos es ir y buscar un lugar donde pasar la noche , ya que seria al otro día o sea el Lunes cuando comenzaríamos el raid , tal es así que a 15 cuadras del centro conseguimos un lugar económico , 15$  los tres en una casa de familia que disponía de varias camas .

La tarde y la noche la dedicamos a recorrer lo mas que pudimos de a pie a la capital salteña, anduvimos por su peatonal, conocimos la iglesia de San Francisco, luego cenaríamos las famosas empanadas salteñas que las hacen por todos lados y están 0,50 $ c/una con una gaseosa de 2 lts.

 

  • Lunes 11 de Febrero de 2002, Etapa 1 (de 5): Salta – La Viña.

Luego de resetear los tres ciclocomputadores de nuestras bicis (aunque solamente el mío seria el de la lectura oficial de los datos, mientras que aprovecharía el de los pibes para los parciales entre pueblos) y siendo las 08:15 hs. Comenzamos nuestro raid por en Norte Argentino.


Antes de partir de Salta Capital
Carlos (izq.) y Julián (der.)
 
Frente a la plaza, en la famosa recova del cabildo salteño
 



Como toda salida de una gran ciudad en este caso Salta, lo hacemos con un pedaleo muy lento y poniéndonos  “a tono” con nuestras bicicletas y cargas, teniendo en cuenta el comportamiento del trafico.
A unos 8 Kmts. y luego de circular algunos de ellos por una cómoda ciclo-via , llegamos a una rotonda en donde se dividen las rutas una va hacia el oeste hacia  San Antonio de los Cobres , nosotros que vamos hacia el sur tomamos por la R.N.68 que va hacia donde dice : “ Cerrillos , Cafayate “ ( y no la abandonaríamos hasta llegar a Cafayate , esta ruta termina allí , con el cruce de la famosa 40 ).
Cuando llegamos a la localidad de Cerrillos (a las 09:50 hs., a 17,5 kmts.)  hicimos nuestra primer parada en una estación de servicio , en donde lo primero que hicimos fue ponernos protector solar en las caras y en el cuello debajo de la nuca , que son partes muy sensibles , porque en otro lado no? , estabamos los tres con ropa larga, tanto calzas como remeras.
Siendo las 10:37 hs. y a 26 kmts. de nuestra salida llegamos a LA MERCED , otro pueblo de importancia , el día esta espectacular , con un solcito que empieza a pesar cada vez mas y con un cielo muy celeste , la ruta es cómoda para el pedaleo , y a medida que  nos vamos alejando de la capital salteña el trafico empieza a aflojar cada vez más .
A nuestro costados, quintas y más quintas con sembrados, y en el horizonte de fondo en semi sombras los cordones montañosos......nosotros vamos pedaleando por la ruta en fila india primero voy yo, me sigue Julián y detrás Carlitos, por mi pequeño espejo retrovisor les veo las caras de emoción y expectativa de querer hacer kilómetros en bici...
A las 11:52 hs. cruzamos el río Rosario e ingresamos al departamento de Chicoana, antes y arriba del puente, aprovechando que se acercaban caminando dos chicas salteñas, les pedí que nos sacaran nuestra primera foto.

 


Cruzando el río Rosario
En la R.N. 68
 


 

Llegando al pueblo de EL CARRIL , y metros antes de cruzar el río Pulares : Pifffffffffffff..........! pincho mi rueda delantera , así que a un costado de la ruta y bajo la sombrita de un árbol cambiamos la cámara averiada , pero luego me ocurrió algo que nunca me había sucedido , luego de cambiar la cámara e inflarla , cuando me disponía a colocarla en la horquilla delantera de repente un : Buuummmm....! , ¿Que había pasado ?...., se ve que las 40 libras que le di con mi inflador de mano eran excesivas....así que a desarmar de vuelta y poner mi tercera y ultima cámara de repuesto....! , en este reventón lo primero que pense fue en la cubierta hay si que estaba listo....! ya que cubierta de repuesto no habíamos llevado ninguno...pero solo había sido la cámara seguramente estaría algo fallada  , así que en pocos minutos me encontré reanudando el viaje sin cámaras de repuesto , ahora solo había que parar en algún pueblo y emparchar.
Llegamos a EL CARRIL a las 11:32 hs. , siguiendo por la ruta 68 , y ya con el sol a pleno y siendo las 12:29 hs. pasamos por el río Osma , cuyas aguas desde la misma ruta se podían apreciar cristalinas al mismo tiempo 100 metros mas adelante se podía ver un puesto de almacén , así que ahí nomás me dije buena oportunidad para parar , descansar , esperar que baje el sol y luego regresar hasta el río a meternos en el o al menos “a mojar las patas” ...!.

 


Carlitos y Julián, refrescándose en el Rio Osma, mientras baja el sol...
 


 

Así fue que bajando a la vera de este típico río de montaña , dejamos nuestras bicis contra un alambrado y los tres  nos sumergimos su cauce “acostándonos” en el y usando literalmente de “almohada” alguna piedra grande , realmente fue relajante no solo el ruido del mismo agua cuando da contra las piedras que seria como un “arrorró” sino también la fuerza que trae la misma y al dar contra nuestros cuerpos , por ejemplo en los hombros produce un efecto “masajeador”.
Luego de este alto , reanudamos el  pedaleo a las 15:30 hs. , ahora el cima había cambiado , el cielo se cubrió y empezó a “chispear” ; noto un ruido en la bici de Julián y compruebo que el descarrilador de los platos toca la cubierta , así que paramos y simplemente enderezo un poco el mismo con la mano.
El terreno se torna ondulado y con mucha vegetación . A las 16:08 hs. llegamos a CNEL. MOLDES ( habíamos hecho 66 kmts. ) , paro de llover , hace calor y esta muy pesado , cruzamos a un matrimonio también cicloturista y nos saludamos  , aquí y por todos lados a medida que nos aproximamos al centro de este pueblo , pero siempre sobre la ruta vemos bares , puestos y minutas que promocionan un  menú  que seria el platillo del lugar : el Pejerrey , lo hacen frito , a la vasca , al ajillo , etc , etc. , esto es debido a la proximidad del dique/embalse  Cabra Corral , que si bien desde aquí no lo vemos , lo tenemos a unos 5 Kilómetros hacia nuestra izquierda.
Nos metemos en el pueblo con un objetivo fundamental que es arreglar mi cámara  pinchada , si bien este pueblo no dispone de un local bicicleteria , preguntando a un lugareño este me indica a una persona que se dedica a arreglar y hace las veces de bicicletero del lugar en el tallercito de su casa , así que es que conozco a Don Gerone  oriundo el de Santa Rosa De Tastil (Salta) , se presta muy amablemente a arreglarme la cámara , mientras tanto nos convida a los nenes y a mi con uvas fresquitas que tenia en su heladera , me cobra un peso , charlamos y luego nos despedimos.
Entonces , un dato útil para aquellos ciclistas/cicloturistas que pasen por CNEL. MOLDES , sepan que en este pueblo lo tienen a esta buena persona que no solo arregla pinchaduras sino que también alinea llantas , cambia rayos , etc , etc.
Otra vez se nubla totalmente , y salimos a las 17:08 hs. , a partir de último pueblo y a nuestra izquierda se ven los cerros atenuados por un gris intenso de lluvia  la misma que en cualquier momento la tendríamos con nosotros , nos lo decía la dirección del viento.
Ahora , si mirábamos con atención a lo lejos los cerros , debajo y costeándolos aparecía el embalse Cabra Corral.
Pedaleando en fila india , despacio , en silencio y con viento , de chipoteando paso a llovizna , aquí la ruta 68 parece hacerse mas angosta ( de unos 6 mtrs las dos manos ).

 


Entre Cnel. Moldes y La Viña
Con algo de llovizna
 


 

A pesar del clima , a nuestra izquierda muchos obreros rurales trabajando en viñedos , mientras que a nuestra derecha prolijas plantaciones de arbolitos de olivo nos acompañan unos cuantos kilómetros.
Para de llover , nos asombra la cantidad de palmeras cuyos troncos son largos lo que ubica a sus hojas y ramas en una posición altísimas ; 18:50 hs. llegamos a LA VIÑA  , a su entrada vemos a un grupo de mochileros entrar caminando al pueblo .
Sabíamos de antemano que este pueblo no dispone de camping , pensión , hostal ni hotel , pero lo que si sabíamos que había casas de familia que tenían a disposición algunas camas y ducha caliente para pasar la noche muy económicas.
Fue así que nos recomendaron ir a la casa de Doña María Copa , la cual a un precio muy económico de 6$ cada uno , nos permitió pernoctar en esta que fue nuestra primer parada , en esta primer etapa , que fue : Salta – La Viña.
Como siempre , y que fue un común denominador en los cuatro días que les siguieron lo que hicimos fue : alojarnos , bañarnos , cambiarnos , salir a cenar y caminar para conocer el lugar donde parábamos , y luego volver al hospedaje a dormir.

 

Datos de la primer etapa de nuestro viaje : “ Vuelta por los Valles Calchaquies 2002 ”

Día Lunes 11 de Febrero de 2002 , Etapa 1 de 5 : Salta – La Viña.

 

Distancia en el día recorrida : 91,31 Kmts.

Tiempo de Pedaleo en día : 5 hs. 51 min. 38seg.

Velocidad Promedio : 15,6 Kmts.

 
  • Martes 12 de Febrero de 2002, Etapa 2 (de 5): La Viña–Cafayate
Al despertar, acomodamos nuestras alforjas, luego desayunamos té con leche y galletas en la casa de la anfitriona y cuando nos aprestábamos a reanudar el viaje, empieza a llover suavemente hasta llegar a ser una lluvia torrencial, mientras tanto pensaba para mí adentro: “...que lastima... si esto no para, me parece que este se viaje se pudre en el segundo día...”, el motivo era porque según lo estipulado había pensado el viaje con los días justos, a razón de hacerlo en 5 y no me daría luego el promedio.

Mientras esperábamos a que pare de llover, conversábamos con Doña María, la cual fue hasta su  árbol de Granadas y trajo tres de estos frutos bastante grandes y nos lo ofreció para nuestro viaje.

Apenas menguo la lluvia, nos largamos a la ruta nuevamente rumbo hacia Cafayate.

El primer pueblito que le siguió fue ALEMANIA, que desde lo alto de la ruta podíamos apreciar su caserío curiosamente construido la mayoría en chapa, a la vera del río Guachipas.

El paisaje ahora y a medida que avanzamos, se torna más agreste, más montañoso, más ondulado, con poca vegetación y por consiguiente sombra. También el día se presentaba con un cielo ahora despejado, con sol y bien celeste.

Transitando en plena bajada entre Alemania y Las Curtiembres, en velocidad y junto a mi hijo Carlos, ya que Julián se había adelantado unos 400 mts. De pronto escuchamos algo así como un: ¡ Ppppssssssss.........!, nos mirábamos con Carlitos, dijimos: ¡...un pinchazo... !...¿.pero de quien. ?, metros más adelante y frenando ambos...¡..Bingo. !, ¡ Otra vez yo....! @@###GRRRRRRRR####, en esta oportunidad le había tocado a mi rueda trasera, así que a un costado de la ruta a buscar la sombra más próxima (que las había poca), a desmontar las alforjas y a efectuar la reparación.

El asunto de los pinchazos, ya me estaba poniendo nervioso, más que nada porque nunca había pinchado tanto en mi vida, en tan pocos kilómetros.

Al cambiar la cámara  y hacer tacto dentro de la cubierta había encontrado una pequeña espinita, estas se desprenden de los arbolitos del espinillo de montaña debido al viento, estas plantas de poca altura abundan mucho, estas espinitas son inevitables de pisarlas con nuestras bicis ya que ni se ven, salvo cuando veíamos algunos trocitos de ramas, el asfalto paradójicamente, está en buen estado, limpio, y bien marcado.

Así que me dije que no sería la última vez en pinchaduras (cosa que así ocurrió lamentablemente, luego pincharíamos: yo nuevamente, Julián 2 veces y Carlos una vez).

Siguiendo y kilómetros más adelante, ya casi el mediodía, el sol empezaba a apretar, para colmo según el mapa no había nada cerca para parar, ni árboles siquiera... !, solo indicaba lo que se suponía debía ser un pueblo llamado: MORALES, seguimos pedaleando para llegar a él, pero nada....; De lejos vemos algo, es un puente sobre el río Las Conchas, es el puente MORALES, ahí nomás les dije a los nenes que pararíamos a un costado del puente, donde había algunos arbolitos con una muy paupérrima sombra,  por otro lado con el agua del río no podíamos hacer mucho siquiera no se podía tomar, ni meternos a refrescarnos, su color marrón es de sedimento y barro que viene de la montaña.

 


 

Foto 1. Carlos y Julián Refrescándose en el río “Las Conchas”, en el lugar llamado Morales


 

Apoyamos nuestras bicis contra los árboles, e improvisamos un almuerzo con las tres granadas que Doña María nos había ofrecido por la mañana, estaban re-calientes, aunque Carlitos y Yo las comimos porque no nos quedaba otra....mientras que Julián prefirió no comer nada y aguantar. Para colmo la única caramañola con agua era la mía, así que se la cedí a los pibes.

Me decía que si hacia ese calor siendo las 13:00 hs. Cómo se iría a poner más tarde...!, de nuevo consulte el mapa y les pregunte a los chicos si en vez de aguantar allí con esa poca sombra no se animaban a proseguir hasta un pueblo próximo que era  SANTA BARBARA (estábamos a unos 8 o 10 kmts. tal vez).

Nos pusimos de acuerdo y no con muchas ganas, cansados y con calor volvimos a la ruta nuevamente, y acá viene lo gracioso, Montamos nuestras bicis, habríamos hecho unos 150 metros. en una curva y de pronto a la derecha un rudimentario almacén.

Los nenes sin que les dijera nada, enfilaron desesperados hacia él en busca de sombra....aunque nos mandamos los tres derecho al interior pidiendo por alguna gaseosa fresca, pero la mujer que nos atendió nos dijo que no tenía nada, lo único algunas latitas de gaseosa y queso de cabra.

Minutos más tarde, estábamos sentados en una mesita de madera almorzando queso de cabra con latitas de coca-cola fresca.

Descansamos adentro y a la sombra, mientras mirábamos algo exhaustos por la puerta hacia fuera, veíamos la ruta y de fondo una gran montaña, afuera el sol estaba como nunca...!, el almacencito nos había salvado .....comprobaríamos luego que lo que indicaba como MORALES en el mapa, era ese almacén y/o a lo sumo el puente sobre el río Las Conchas.

A las 15:30 hs. luego de un excelente descanso con algo de viento y algo nublado, tomamos la ruta nuevamente y a partir de allí en lo sucesivo y hasta llegar esa noche a Cafayate seriamos testigos los tres de uno de los paisajes más bellos y espectaculares que nos toco conocer tanto los chicos como a mí, en lo que respecta a mis casi 42 años, debo decirles que he tenido la suerte de conocer bastante a nuestro país y algunos lugares del exterior, pero les confieso que lo que hemos visto y/o vivido esa tarde fue lo más maravilloso que me ha ocurrido delante de mis ojos y arriba de una bicicleta.

Se trataba de la “Quebrada de las Conchas ” trazado imponente y soberbio, donde las protagonistas son las montañas de impactantes formas, en las cuales su tonalidad se revela siempre cambiante según incida la luz del sol a medida que progresa el día, una cosa son a la mañana, otra a la tarde y tardecita, ...no me quiero imaginar cuando llueve...!, realmente ESPECTACULAR este paisaje, y la cinta asfáltica de traza serpenteante, de una manera suave, que permite al ciclista poder, pedalear, mirar, sentir y oler.., lo que permite disfrutar como se debe a esta quebrada.

 


 


Foto 2. Ingresábamos pedaleando a la espectacular “Quebrada de las Conchas”


 

A las 16:35 hs. a nuestra izquierda aparece la primera imagen, escultura y formación natural en la montaña que se ha dado en llamar “La Garganta del Diablo”, luego muy cerca tan solo a 500 metros le sigue “El Anfiteatro”, ambas formaciones en forma de recintos o boquetes gigantes dentro de la montaña de más de 50 mts. de altura, ambas formadas por el paso del tiempo y la erosión del agua sobre ellas que las ha cortado verticalmente.

 


 


Foto 3. Promediando la etapa estábamos a 50 kmts. De Cafayate, en medio de la quebrada


 

Una vez al año orquestas desde Salta y Tucumán, se dan cita en “El Anfiteatro” con sus instrumentos para gozar de la acústica natural de este magnífico lugar.
17:34 hs. Bicicleteando por este excelente lugar,... pincho por tercera vez. (otra vez la rueda trasera).
18:16 hs. Llegamos a SANTA BARBARA, tomamos una gaseosa de 2Lts. ½ y recargamos nuestras caramañolas.
18:29 hs. Pasamos al lado de una pequeña formación rocosa denominada “El Sapo”, debido al parecido a este animalito.
18:35 hs. A nuestra derecha un cartel nos indica que estamos pasando al lado de una formación sobre una montaña muy parecida a lo que sería un párroco parado:  “El Fraile”.
El paisaje se presenta hermoso para contemplar, el sol ya se está escondiendo tras los cerros, observamos como una bandada de loros chillando como locos pasa a un costado nuestro en el valle y sobre el río.
 


 


Foto 4. El entorno era maravilloso, cada tramo tenía su belleza


 

18:49 hs. De pronto delante nuestro se presentan montañas de varios colores y en franjas diagonales, se trata de lo que ahora se indica como “La Yesera”, hermosas e impresionantes, me detengo a observar a una montaña en particular a mi izquierda y muy próxima, veo como la misma es en su mitad trazada como por una línea que la divide en dos colores, abajo blanca, arriba bien marrón, sencillamente de no creer.....En ese pequeño valle, es el contorno como una gran acuarela, en donde sus colores lejos de desentonar, armonizan.

19:29 hs. Pasamos por “El Obelisco”, montaña natural en forma de esta figura.

Le siguieron figuras como “Las Ventanas”, “Los Castillos” siendo estos dos, los últimos que nos ofrecía este circuito natural.

Este tramo fue rico y abundante en formas y colores de las montañas, recuerdo piedras que conformaban a las mismas  en formas diversas, algunas como afiladas y en punta, otras redondeadas como bolas, otras con agujeros como esponjas, otras con muchos agujeritos y en cada uno de ellos algún loro o en su defecto, alguna parejita de esta especie,.....en fin fue algo alucinante que jamás olvidaremos..

 


 

Foto 5. Carlitos, subiendo una suave cuesta, detrás...la belleza Salteña

 

19:54 hs. Llegamos a un cruce de ruta llamado “LA PUNILLA” con las ultimas luces del día, estábamos tan solo a 22 kilómetros de Cafayate, a partir de aquí vamos alejándonos de ambos cordones montañosos que nos habían deleitado durante tantos kilómetros, y nos vamos adentrando con rectas largas y extensas, hacia el centro del valle.

La tierra a los costados se presenta bien roja y con muy poca vegetación, a la distancia se puede apreciar las luces de la ciudad de Cafayate la cual se haya recostada sobre la “Sierra de los Quilmes”, recorriendo los últimos kilómetros de la ruta 68, pasamos junto a numerosas bodegas de renombre: Michel Torino, Etchart Privado entre ellas.

21:03 hs. Llegamos al fin de la ruta 68, y tomamos hacia la izquierda ahora por la legendaria ruta 40, estamos a 2 kilómetros del centro.

21:22 hs. Llegamos al centro de Cafayate, y de inmediato nos vamos a una bicicleteria a emparchar las tres cámaras.

Fue llamativo llegar a esa hora y ver a gran cantidad de gente en las calles y la mayoría de sus locales comerciales abiertos.

 


 

Foto 6. Al día siguiente a nuestra llegada a Cafayate, a punto de partir de este hermoso y viñatero pueblo del sur Salteño

 

Luego, nos dirigimos a un camping ubicado en pleno centro, en donde rentamos tres camas cuchetas a 6$ por persona, nos bañamos, cenamos y luego caminamos para poder conocer a la hermosa Cafayate, a sus gentes y muy en especial comprobar lo que siempre se dijo: “Cafayate posee el cielo más hermoso y limpio de la Argentina”, cuando dirigimos nuestras miradas hacia el cielo nocturno Cafayateño, tanto los nenes como yo, quedamos mirando en silencio ese manto negro repletísimo de estrellas y nebulosas, y nos dijimos, si tenían razón el cielo es espectacular. de lo mejor que vimos hasta ahora.

 


 

Datos de la segunda etapa de nuestro viaje: “Vuelta por los Valles Calchaquíes 2002 ”

Día Lunes 11 de Febrero de 2002, Etapa 2 de 5: La Viña-Cafayate

Distancia en el día recorrida: 110,86 Kmts.

Tiempo de Pedaleo en día: 6 hs. 50 min. 02 seg.

Velocidad Promedio: 15,7 Kmts.

 
  • Miércoles 13 de Febrero de 2002, Etapa 3 (de 5): Cafayate-Amaicha del Valle
Por la mañana nos dirigimos a la plaza principal de Cafayate, y fuimos a desayunar con los nenes a un barcito, el cual disponía de mesas en su vereda y también en la ancha calle donde nos habíamos ubicado en una de ellas, estábamos sobre la mismísima ruta 40.
Mientras desayunábamos, observamos el cordón serrano donde se recuesta Cafayate, la nubes parecen detenerse  ahí y no pasan....permitiendo al pueblo gozar constantemente un cielo limpio, claro y celeste, que es el que tenemos arriba nuestro.
Les comentaba a los nenes, mostrándole el mapa el tramo que haríamos ese día saliendo desde Cafayate hasta Amaicha, tomaríamos la ruta 40 hacia el sur, por la que rodaríamos el mayor trecho, y kilómetros antes de llegar a Amaicha viraríamos hacia la izquierda para hacer los últimos kilómetros por la ruta 307.
Partimos a las 10:00 hs. exactas de Cafayate, y por kmts. y kmts. de un lado y de otro viñedos y más viñedos, aparentemente se tratan de la Bodega “Peñalva Frías” según rezaban carteles cada tanto.
 
Foto 8. Saliendo de Cafayate, lo que abundan son viñedos y bodegas.
 
A las 10:52 hs. y habiendo hecho 14 kilómetros, llegamos a uno de los pocos pueblos de este gran valle: TOLOMBOM.
Es donde vemos a un muchacho regar el pasto con una manguera, aprovechamos entonces y le pedimos recargar nuestras caramañolas.
Proseguimos el pedaleo, y tal como se indica en el mapa, ahora transitamos casi por el medio del valle, son todas rectas larguísimas y sin desniveles, llanas y planas, lo que nos permite incrementar mas la velocidad.
Este tramo es particular por su escasa vegetación, solo arbustos y árboles pequeños, increíblemente promediando el mediodía se nos cruzan cada tanto algún zorro pequeño, a veces de a dos.
Mientras circulamos por el llano, dirección sur, vemos a nuestra izquierda y a lo lejos el cordón de las “cumbres calchaquíes”, mientras que a nuestra derecha pero mucho más cerca las sierras de los Quilmes.
A las 11:56 hs. llegamos al paraje de “la viñita”, es aquí donde está el límite entre Salta y Tucumán.
 
Foto 9. Julián, posando en el cartel interprovincial, de Salta entrábamos en Tucumán.

Siendo las 12:40 hs. llegamos a un pueblito muy parecido a Cafayate, solo que este es más pequeño, más tranquilo y tan bello como aquel, se trata de COLALAO DEL VALLE.(a 35 kmts. de Cafayate).
Hacemos aquí la parada del mediodía, nos ponemos de acuerdo para comer y vamos a un almacén donde compramos salame, queso, pan y gaseosa. Pegadito al lugar se encuentra la placita del pueblo, en donde en un banquito largo de madera, debajo de la sombra, devoramos varios sándwiches.
No obstante esto, el calor se sentía aun bajo la sombra y se estaba poniendo pesado. Les propongo a los nenes regresar a un camping que habíamos visto a nuestra entrada a Colalao, el cual disponía de una espléndida pileta de natación a la cual la habíamos observado con cariño a nuestro paso por allí.
 
Foto 10. Detrás de mí, el símbolo emblema de nuestro norte: EL Cardón.

Volvimos solo algunas cuadras, llegamos al camping, golpee las manos y saliendo su dueño, le pregunto si podríamos en lo posible poder quedarnos en el quincho del camping solo por dos o tres horas y poder meternos a la pileta, hasta esperar que baje el sol.
El muchacho asintió de inmediato, que no había problemas y que solo nos cobraría 1$ a cada uno, así que todos contentos.
Por otro lado quiero recomendar e indicarles este camping, que según me contó el dueño, se habilito hace un mes. Esta muy bien ubicado, es Colalao un Cafayate “en miniatura”, tiene pileta, parcelas, comedor y servicio de bar. ah..! los baños un espectáculo.
El sol estaba fuerte, tuve “que sujetar” a los nenes. ya se querían meter sí o sí...!, les pedí que tan solo aguantaran aunque sea ½ horita.
Luego de la digestión....plooffff....!, los tres al agua. !, el agua estaba caliente arriba y fría debajo.....pero que placer... !, en nuestros cuerpos sudorosos y con calor, nos vino bien a los tres hacer este tipo de parada algo “especial”.
 
 
Foto 11. En el camping de COLALAO DEL VALLE, haciendo un descanso al mediodía.
 
Más tarde tomamos una coca-cola sentados en una mesita dispuesta debajo de un sauce enorme y observábamos como refusilaba y oíamos como tronaba arriba en los cerros, realmente se veía allá arriba todo muy gris seguramente habría allí una lluvia de aquellas......algo extraño mientras donde estábamos el sol rajaba la tierra...!.

Partimos nuevamente a las 15:35 hs., y a las 16:39 hs. pasamos por “el bañado”, 16:54 hs. pasamos por la entrada que lleva a las ruinas de los indios Quilmes, solo que desde la ruta hacia allí debíamos hacer 5 kmts. de ripio (nos dijimos 5 de ida y 5 de vuelta, son 10, y unas dos horas “extras”, optamos por no hacerlo, así que seguimos de largo, queríamos llegar temprano a Amaicha...!.

 


Foto 12. El cartel nos indica la entrada al “Rincón de los Quilmes”, ruinas históricas de estos nativos.

 

Kilómetros más adelante.....¡..pincho Carlitos...!, y perdió el invicto...!,  nos venía “gastando” a Julián y a mí (en especial a mí), porque siempre “interrumpíamos” el periplo con “nuestras pinchaduras”....y bueh...! le toco a él en su rueda trasera.

Llegamos a un punto de la ruta 40 en donde hay una bifurcación: si seguimos derecho por la 40 a tan solo 24 kmts. Teníamos al pueblo de Santa María en la provincia de Catamarca (provincia que no tengo el gusto de conocer y por un momento se me cruzo hacerlos para aunque sea pisarla..), pero como nosotros la etapa la terminaríamos en Amaicha (ya rumbo a Tucumán), tomamos aquí hacia la izquierda cruzando un largo puente sobre el río Santa María, dejábamos así la ruta 40.

Aquí, y ya en este tramito de la ruta 307 hasta Amaicha, empiezan las ondulaciones del terreno, pequeñas subidas y pequeñas bajadas, el paisaje siempre es tirando a estéril, y con curvas y contra curvas vamos enfilando hacia las montañas nuevamente, de lejos podemos apreciar a el pueblo, más arriba y a lo lejos sobre las montañas, veo el “Abra Del Infiernillo”, paso más alto que debemos superar en el día de mañana para llegar a Tafi.

Les indico entonces a los pibes diciéndole: “Ven chicos... allá arriba, en donde parecen unirse esas dos montañas, mañana vamos a pasar......fíjense esta tapado en nubes y según me dijeron tendremos que superar unos 3065 m.s.n.m.”.

A las 18:30 hs. de  la tarde llegamos a AMAICHA DEL VALLE.

 


Foto 13. Nuestra llegada a Amaicha del Valle.

 

Esta etapa aquí en Amaicha fue especial, ya que pararíamos en la casa natal de una vecina nuestra  aquí en Morón, la cual sabiendo de nuestro viaje, nos “obligo” a parar en la casa de su madre Doña Juana De Guerra.

Ubicada la casa de nuestra anfitriona, la misma de entrada nos recibió con un Té con bizcochos, charlas de por medio, nos mostró sus cultivos de durazno, sus uvas, su casa.

Nos mostró nuestra habitación y las camas, que ya las había preparado para nuestra llegada.

Nos bañamos y cambiamos con ropa cómoda, los tres con pantaloncitos cortos y remera, y salimos a conocer Amaicha del Valle, cenamos y luego por recomendación de un nieto de Doña Juana, tomamos un remis hasta el observatorio astronómico de Ampimpa (en Ampimpa, ubicada a pocos kilómetros de Amaicha).

El observatorio se ubica allí, precisamente por lo nítido del cielo por estos lugares sin contaminación, aquí en Amaicha el cielo es más luz que oscuridad, repletísimo de estrellas.

Luego de esperar nuestro turno porque había en esos momentos otra gente que estaba observando por el telescopio, entramos con los nenes e incluido el remisero que gentilmente tendría que esperarnos.

Fue así como el encargado esa noche del telescopio, posicionando este y girando cada tanto el techo en forma de cúpula con una ranura en el medio, nos posibilito poder observar por primera vez en nuestras vidas primero a Saturno, luego Júpiter y por último la nebulosa de Orión (que esta pegadita a las tres marías mas chicas).

Esa fue la noche en Amaicha, lo que menos me imagine que terminaríamos observando desde allí a los planetas, debo confesar que no sabía de la existencia de este observatorio en este lugar de Tucumán.

Para más datos el viaje de ida y vuelta, con espera incluida hasta el observatorio en Ampimpa, nos salió 6$, y la observación por persona 2$ cada uno. Realmente valió la pena.



Datos de la tercera etapa de nuestro viaje: “Vuelta por los Valles Calchaquíes 2002”

Día Miércoles 13 de Febrero de 2002, Etapa 3 de 5: Cafayate-Amaicha del Valle

 

Distancia en el día recorrida: 71 Kmts.

Tiempo de Pedaleo en día: 4 hs. 30 min. 57 seg.

Velocidad Promedio: 15,9 Kmts.


  • Jueves 14 de Febrero de 2002, Etapa 4 (de 5): Amaicha del Valle-Tafi del Valle.
La etapa de hoy sería como se dice: el día “D”, ya que para unir Amaicha con Tafi, primero deberíamos de pedalear unos 30 kilómetros de continua subida hasta alcanzar el “Abra del Infiernillo” a 3065 m.s.n.m. para luego bajar unos 22 kilómetros aproximadamente hasta Tafi.
La noche anterior decidí madrugar un poco más, pues no quería que nos agarre el mediodía en plena trepada, como se sabe la incidencia solar a mas altura no perdona y encima la posibilidad de que alguno de nosotros nos apunemos.....mmmmm..!!!.
Así que siendo las 06:30 hs. me desperté y mientras dejaba dormir otro rato a los nenes, me puse a acomodar todas las bicis con todas las alforjas, me cambie y les deje la ropa larga a los preparada a ellos.
Doña Juana a todo esto ya había madrugado y se encontraba en su quinta pelando duraznos para hacer mermelada y ponerla en frascos, como me había comentado.
Una vez levantados los “purretes”, nos  despedimos de nuestra anfitriona, una foto de por medio junto a ella en el frente de su casa aquí en Amaicha para llevarnos un lindo recuerdo. Posterior a los saludos salimos hasta la ruta, más precisamente para parar en una estación de servicio y desayunar algo de muchas calorías: café con leche, alfajores de miel de caña, y jugo de frutas, sabía que nuestros cuerpos luego agradecerían ese combustible en los 30 kmts. de subida que nos esperaban....
07:53 hs. Comenzamos otro día espléndido con un cielo bien celeste, el sol había salido hace rato pero ya quería salir de entre los cerros, una de las primeras cosas que hago es mirar hacia la zona más alta....allí...por donde deberíamos pasar y a diferencia del día anterior estaba clara y despejada, siempre y por la tarde se cubre de nubes.

08:47 hs. Pasamos el primer pueblito Ampimpa, kilómetros más adelante el observatorio (12 kmts. desde Amaicha) al cual visitamos la noche anterior.

Desde la salida de Amaicha, los tres ponemos nuestras bicis en una relación Plato 1 Corona 2, y le damos duro y parejo.....parecemos hormiguitas, despacio...pero de a poco vamos avanzando.....les digo a los nenes que vayan disfrutando del paisaje (en la medida de que les sea posible), sin apuro y que siempre respiren por la nariz.

  

Foto 14. Subiendo hasta llegar al “Abra del Infiernillo”.

 

Algunas son rectas largas, y por supuesto en subida, lo que hace que el asunto se ponga algo monótono, es por eso que aprovecho y hago algunas paraditas técnicas, más que nada para que los pibes “no me aflojen”...en una de ellas, volvemos nuestra vista a lo ya hecho y vemos a Amaicha allá...! ...cada vez más abajo, más chiquita y más lejos...la vista es muy tranquila y bonita.

Siempre en subida, arriba el asunto es un poco más entretenido ya que hay algunas curvas y contra curvas, vamos ganando altura, es como si fuéramos dejando un gran valle para pasar a otro...Hay algo de tráfico, pero todos conducen lenta y respetuosamente.

 

 


Foto 15. Carlitos, preparándose para la gran bajada.

 

En algunos tramos pienso que no vale la pena “matarse” pedaleando ni siquiera P1 C1 y les indico a los nenes que se bajen y caminamos un poco.

Hasta que a las 12:07 hs. llegamos a “El Infiernillo”(habíamos hecho 29,11 kmts. desde Amaicha), estábamos en el Top de nuestro paso por la montaña....!

A pesar que el sol ya estaba apretando bastante, y nuestras caramañolas sin una gota, nos mostrábamos tranquilos y dispuestos a aguantar un poco más, sabíamos que hasta Tafi no pedalearíamos más ya que era toda bajada....!.

Desde “El Infiernillo”, le siguen algunas ultimas “subiditas” y luego unos 4 kilómetros más de pedaleo pero ahora sobre una meseta que pre anunciaba lo que se avecinaba: una bajadita de aquellas...!.

 


Foto 16. Antes de bajar a Tafi, pedaleamos un poco junto a las nubes.

 

Bueno...que se puede decir de lo que fue la bajada hasta Tafi, primero me largue yo adelante, más que nada para ir “descubriendo” el camino y anticiparles a ellos ante un eventual peligro de o en el mismo....y también escudar un poco a los nenes respecto al tráfico de frente, pero cada tanto yo hacia una parada al costado de la ruta y disfrutaba verlos venir desde allá arriba.....tenían que verles las caras de emoción el poder bajar sin pedalear tantos kilómetros...!, sin duda alguna era para ellos la primera gran bajada en bici en este viaje, pero también la primera vez en sus vidas seguramente.....!, solo tenían el sol y el viento sobre sus caras, no había otra cosa....

 


Foto 17. Allí debajo de nosotros.....Tafi del Valle.

 

Llegamos a TAFI DEL VALLE a las 13:48 hs. con mucho calor y sol, descansamos y luego almorzamos empanadas y milanesas napolitanas con una gaseosa bien fresquita.

Luego de preguntar en la oficina de turismo de Tafi, la cual nos indica que debido al comienzo inminente de la “Fiesta del Queso”, no hay muchos lugares disponibles y que encontraríamos lo más económico en el autocamping “Los Sauzales”, hacia donde nos dirigimos algo cansados a 400mts. de allí, en donde luego alquilaríamos una cabañita en 20$ el día.

Apenas llegamos “nos tiramos” vestidos y todo a las camas en donde dormitamos una especie de siestita.....dentro de la cabaña sentimos llover y si....se había largado con todo..!, no obstante eso, nos bañamos, nos cambiamos y lloviendo y todo salimos a recorrer Tafi del Valle.

En Tafi del Valle, supimos estar de vacaciones hace 8 años, cuando ellos eran muy chicos junto a mi señora,  puedo asegurarles que si bien el mapa urbano pareciera ser el mismo, Tafi a cambiado muchísimo, tal vez la década de los ’90 la lleno de locutorios, remises, parrillas y muchos pero muchos autos, no solo de muchos turistas sino también de Tucumanos.

Le siguió por la noche, seguir caminando, charlar con los comerciantes y con alguna que otra mas y de cena unos buenos platos de Locro para los tres....exquisito..!, otra pequeña caminata y al camping a dormir, en el día que le seguiría haríamos la última etapa hasta San Miguel de Tucumán...esto se estaba acabando.

 






 Datos de la segunda etapa de nuestro viaje: “Vuelta por los Valles Calchaquíes 2002”

Día Jueves 14 de Febrero de 2002, Etapa 4 de 5: Amaicha del Valle-Tafi del Valle

 

Distancia en el día recorrida: 56,54 Kmts.

Tiempo de Pedaleo en día: 5 hs. 21 min.  25 seg.

Velocidad Promedio: 10,5 Kmts.

 
  • Viernes 15 de Febrero de 2002, Etapa 5 (de 5): Tafi del Valle-San Miguel de Tucumán.
A media mañana estamos entre las calles Gdor. Critto y J.D.Peron, aquí en Tafi en una panadería en la cual también ofrecen desayuno así que nos despachamos con café con leche y medialunas.
La mañana amaneció con llovizna, la cual desde que dejamos el camping no paro en ningún momento, mientras desayunamos observamos a través de los vidrios y no con mucho agrado veo que entre los cerros todo está muy gris y tirando a negro, intuyo que esa llovizna no pararía....es más, tendríamos esta última etapa seguramente con lluvia.
Si bien llovía, lo hacía pero en forma de llovizna, al mojarnos el mismo viento al andar en bici nos iba secando al mismo tiempo, por otro lado las alforjas todavía se las “bancaban” (no habíamos llevado bolsitas de consorcio), así que por eso todavía no teníamos puesto el equipo de lluvia.
Pero a medida que nos alejábamos de Tafi e íbamos acercándonos al dique “La Angostura” el asunto se puso más copioso en la manera que caían las gotas, así que ahí nomás, a un lado y debajo de un árbol nos vestimos con equipo impermeable del tipo “rompe viento” pero solo en la parte superior del cuerpo.
A medida que avanzábamos por momentos llovía fuerte, pero a Dios gracias la mayor parte del tiempo era simplemente llovizna aunque un poco intensa.
Desde Tafi y hasta  “El Mollar”, infinidad de sapitos pequeños se nos cruzaban en la ruta, en fin.....muchos de ellos, lamentablemente quedaron inmortalizados para siempre debajo de nuestras cubiertas, no podíamos evitarlo.
Pedaleamos en silencio, en fila india, se siente el ruido de la lluvia sobre nuestros pilotines, la ruta es recta y tranquila, a nuestra izquierda las montañas, a nuestra derecha y debajo el dique “La Angostura” hermoso espejo de agua este en las alturas de Tucumán, en la costa se pueden ver algunos pescadores que prueban suerte con Truchas, percas o tal vez pejerreyes.
 
 
Foto 18. A nuestro lado el dique “la Angostura”...bajo la lluvia.
 
Luego pasamos a un lado del parque de “Los Menhires” en donde arriba de una montaña en particular se encuentran estas piedras gigantescas de granito talladas hace siglos por habitantes de los Valles Calchaquíes. Pasamos y paramos en la entrada que lleva a otro pueblito que está al lado de esta laguna, se trata de: “El Mollar”, hicimos desde Tafi unos 9,56 kmts. en 35 minutos.
A partir de aquí la bajada es de pendiente muy pronunciada, y ya los tres circulamos a plena velocidad, la llovizna es intensa, no hay mucha visibilidad hacia delante aunque si en la ruta, las nubes “se metieron” dentro del valle y entre las montañas, los nenes y yo vamos bajando con cuidado si bien lo hacemos rápido vamos “clavando frenos”, aflojando los mismos en las rectas, pero cuando estamos nuevamente ante una próxima curva otra vez le vamos dando puntazos de forma pareja a los dos manillares y siempre respetando no salirnos de nuestra derecha y mano correspondiente, ya que uno nunca sabe de los vehículos que vienen de frente, en más de una oportunidad a aparecido alguno de ellos de golpe detrás de una curva de montaña.
Llega un momento que la lluvia es intensa y les digo a los nenes que sigan un poco más, hasta encontrar “algo” en donde guarecernos, ya que lo único que disponíamos eran solo piedras y frondosa vegetación pero de ambiente húmedo y mojado.
Hasta que de pronto ante nuestras vistas aparece un puestito de venta de artículos regionales, y de “tiro” paramos y nos ubicamos debajo del alero del mismo, sirvió la oportunidad para mientras conversábamos con su dueño, comprarle y degustar unos ricos caramelos de miel de caña. Estuvimos unos 40 minutos, hasta que vimos que paro lo suficiente como para seguir.
 
Foto 19. Bajando entre los montes tucumanos.
 
Estábamos a 20 kilómetros de la estatua del indio, las bajadas siguieron espectaculares, sentíamos ruidos a caídas de agua de pequeñas cascadas desde la montaña y también del río debajo.
Julián me indica que la manija del freno esta floja, al verla de primera me dije “uy...sonamos se corto el freno...!”, pero no...! su freno trasero se le había gastado por completo, las zapatas de goma literalmente se le habían “derretido”, las llanta trasera era todo un gran liquido negro, pobre Julián...se ve que venía clavando freno a lo loco....
Enseguida, regule el registro de ese freno para aprovechar los últimos milímetros de goma, pero opte por conducir la bicicleta de él y por supuesto ofrecerle la mía.
Al llegar y pasar al famoso monumento al indio, lo que le siguió después solo fueron pendientes pero ahora con mucho menos pendiente, más suaves, y de rectas más largas.
A las 14:30 hs. paramos en SANTA LUCIA (a 53,72 kmts. desde nuestra partida de Tafi), a almorzar, todavía llovía. Este pueblo supo tener allá por las décadas de los ’70 y ’80 un ingenio azucarero que laburaba a “full” donde trabajaban muchísimas personas......hoy en el solo se cultiva y produce el limón.....me supo contar el hombre del barcito en donde comimos unos ricos sándwiches de milanesa completos.
Desde este ultimo pueblo, ahora tomamos por la ruta 344, todo el trayecto ahora es llano, poco a poco esta parando de llover.
Pasamos por otro pueblo: Tnte. Berdina, y a las 15:16 hs. llegamos a un pueblo bastante grande llamado: Famailla (que es también cabecera de partido, está a 73 kmts. de Tafi).
16:15 hs. pasamos por Villa Reducción, y como todo ingreso a una gran ciudad, en este caso próximos a San Miguel de Tucumán, el tráfico me empieza a preocupar ya que aquí la ruta es mas angosta, con muchos camiones acoplado, y micros de larga distancia.
A las 16:27hs. Llegamos a San Isidro de Lules (tierra natal de “Palito” Ortega), paramos en una estación de servicio al baño, y le pregunto al playero por otra alternativa con menos trafico rumbo a la capital tucumana, me indica que lo más tranquilo es ir por la autopista 380, la cual es más ancha y con menos tráfico. Para eso debía “apartarme” de Lules unos 5 kilómetros para tomarlas. 
 
Foto 20. Saliendo le Lules, rumbo a tomar la autopista 380.

Así que  lo hicimos, el sol increíblemente aquí en el “bajo” ahora nos estaba achicharrando...!, después de una mañana de pedaleo bajo la lluvia...!, andar por las montañas y bajar de ellas en el día tiene estas sorpresitas...!.
Unos 15 kilómetros por la autopista y allá lejos y a la izquierda S.M. de Tucumán a la vista...!, sus antenas y edificios nos lo indicaban..
Hicimos el ingreso por la calle Jujuy, que la agarramos desde un acceso en la autopista, esta entrada a la ciudad realmente es lamentable......el estado de esta calle es catastrófico...perros muertos en las calles, bolsas de basura en cualquier lado, vidrios rotos por doquier, el asfalto al parecer como lo están arreglando (aunque parece ser que desde hace muchísimo que esta obra se la ha abandonado) está con un pozo en el medio donde circulan los vehículos pesados entre charcos y “lagunas” de agua grandísimas, y a los costados (por donde vamos nosotros) una especie de cordón mas calzada en donde convivimos con los carros tirados por caballos (nunca vi tantos en mi vida), bicicletas, y vehículos chicos como por ejemplo motonetas, fíat 600, etc. todos conviviendo en este pequeño sector supeditado a ser salpicado de manera ininterrumpida por los vehículos grandes que circulan por el pozo central y no reparan en el agua que te tiran encima, y para rematarla de 30 semáforos que pasamos hasta llegar al propio centro, funcionando unos cinco (que son precisamente los cinco del centro). Me preguntaba, al haber recorrido tanto esta provincia, porque tanta decadencia, mugre y destrucción aquí, precisamente en donde tendría que estar todo una pinturita, como en Amaicha y Tafi por ejemplo, que también son tucumanas, decisión política.....ummmm, creo que no..!.
Me parece a mí y es mi opinión, aquí no tiene nada que ver el FMI., Alfonsín o Menem, no debemos esperar que nadie nos haga las cosas "primarias”, el “ABC”, eso depende mucho de un pueblo y de la idiosincrasia del mismo al margen sus recursos.
Superado este caos que fue el ingreso a la ciudad por varios kilómetros, les dije a los nenes que les parecía terminar nuestro Raid que hemos dado en llamar “Valles Calchaquíes 2002”, de manera oficial en la casita de Tucumán, testigo de nuestra independencia como nación (que tiempos aquellos...!).
 
Foto 21. Misión cumplida...!, habíamos llegado, ahora en la casita de Tucumán
 
Luego de tomar por la calle Congreso, llegamos a las 18:32 hs. a la Casita de Tucumán, en donde nos hicimos sacar una foto los tres con nuestras bicis, el objetivo había sido logrado a Dios gracias muy bien, unimos Salta capital con Tucumán capital, este motivo de unir a estas dos provincias al norte de nuestra Argentina, también fue la excusa para transitar a pleno por los fascinantes Valles Calchaquíes nada más ni nada menos que junto a mis dos hijos.
Como siempre, retorno a Bs. As. con la sensación de haber estado en otro país, conocer a nuestra Argentina pues bien vale la pena, recorrerla en bicicleta, mucho más.
 
 
  
Datos de la Quinta etapa de nuestro viaje: “Vuelta por los Valles Calchaquíes 2002”
Día Viernes 16 de Febrero de 2002, Etapa 5 de 5: Tafi del Valle-San Miguel de Tucumán
 
Distancia en el día recorrida: 113,34 Kmts.
Tiempo de Pedaleo en día: 5 hs. 50 min.  59 seg.
Velocidad Promedio: 19,4 Kmts.
  

Datos finales del viaje: Salta-Tucumán, por los “Valles Calchaquíes 2002”.
Lo hicimos en 5 días, desde el Lunes12-02 hasta el Viernes 16-02-02
Totalizamos 445,31 kilómetros, a razón de 89 kilómetros por día

 

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